CON LA AYUDA DE LA PEDAGOGÍA...

CON LA AYUDA DE LA PEDAGOGÍA…

 

Ana M. Muñoz González

Estudiante de Psicopedagogía, asociada núm. E-137

En prácticas en COPEC-LLEIDA

Lleida, marzo 2014

 

“Una reforma real de la escuela tendría que nacer de los que trabajan en ella, como exigencia de nuevos niveles profesionales, para la construcción de los cuales se deberían utilizar todas las energías actualmente disponibles” Francesco Tonucci

 

En el momento actual resultaría hipócrita no admitir que la escuela necesita una reforma, los bajos resultados en los Informes PISA y el índice de fracaso y abandono escolar demuestran la imperiosa necesidad que tenemos de reinventar la escuela.  Para todos aquellos que, como yo, hace pocos años que se inician en la práctica educativa y se han encontrado en un momento en que los recursos escasean, el respeto de la sociedad por los profesionales de la educación está en decadencia y, a menudo,  las prácticas educativas en el aula no dan respuesta a los diferentes estilos de aprendizaje, por estos motivos aquellos que somos noveles nos planteamos de que manera podemos colaborar para mejorar esta situación.

 

Personalmente busqué la respuesta a esta pregunta en la pedagogía y las consecuencias fueron muy positivas. Paralelamente a la situación que vive la educación actual, existen movimientos, redes, escuelas, fundaciones... que trabajan para encontrar prácticas educativas adecuadas, innovadoras y con buenos resultados, que podrían suponer el resurgimiento de la educación. Estoy hablando de maestros, profesores, pedagogos, psicólogos y psicopedagogos que, como dice  Tonucci, utilizan todas las energías de las que disponen para encontrar nuevas metodologías o mejorar las ya existentes.

 

Inmersa en mi búsqueda, asistí a dos Jornadas diferentes: la “Jornada 2.0” el Día de la maestra y el maestro del Movimiento de Innovación Educativa de Lleida y la Mesa Redonda “Pedagogía, educación y cooperación” que el Col·legi de Pedagogs de Catalunya, llevó a cabo en Tarragona en colaboración con la Facultad de Educación y Psicología de la URV.

 

Por un lado, la “Jornada 2.0” se iniciaba con una conferencia sobre los principios de una buena comunicación y ofrecía diversos recursos TIC para mejorar la competencia comunicativa de los alumnos en el aula y finalizaba con la experiencia de la escuela Francesco Tonucci de Lleida donde trabajan los contenidos por rincones. Siguiendo el hilo de la primera conferencia, las maestras de la escuela Tonucci explicaron como trabajaban la competencia comunicativa y digital en la educación primaria, añadiendo fotos y vídeos de las actividades descritas.

 

Durante el turno de preguntas, los asistentes mostraban incertidumbres y recelos sobre los resultados académicos reales que se obtienen de este método de trabajo por rincones pero las ponentes disiparon las dudas explicando que, de esta metodología, surgían alumnos que alcanzaban las competencias básicas, los contenidos y que eran capaces de trabajar de forma autónoma. Sorprendía comprobar como una clase que dista tanto del modelo tradicional conseguía funcionar sin el maestro haciendo de transmisor en todo momento.

 

Por otra parte, la Mesa Redonda “Pedagogía, educación y cooperación”, de COPEC-TARRAGONA, constaba de diferentes ponencias que ofrecían ejemplos de metodologías y proyectos que han tenido éxito en su aplicación. Todas ellas eran interesantes y se podía aprender mucho de sus experiencias.

 

Destacaría el trabajo cooperativo del Col·legi Vedruna Sagrat Cor de Tarragona en el cual los alumnos de ESO trabajan en grupos de cuatro y lo hacen de forma autónoma. Esta propuesta pedagógica pretende trabajar los contenidos tradicionales pero con una metodología nueva en la cual los estudiantes procesan y buscan información sobre un tema trabajando en grupo, a la vez que dividiéndose las tareas. Ellos mismos ayudan a escoger los campos de trabajo, se organizan y se evalúan; desarrollando ejemplarmente su capacidad de trabajo en grupo y, al mismo tiempo, la autonomía.

 

Resultaba también innovador el Proyecto Submarí Lila el cual da especial importancia a vivir de forma armónica la discontinuidad entre familia y escuela. En este proyecto, el claustro está formado por maestros y familias, que deciden conjuntamente la línea pedagógica del centro. La particularidad de este radica en la gran implicación de las familias que pueden entrar a observar el desarrollo de las clases y del centro siempre que lo deseen. Además, los períodos de transición están marcados por la necesidad del alumno; por tanto, existe la posibilidad que los padres de un alumno de P3 se queden en el aula durante más de medio curso si el alumno así lo requiere.

 

Finalmente, sorprendía el proyecto de comunidades de aprendizaje de la Escuela Alberich i Casas de Reus en el cual diferentes voluntarios de la sociedad participan en las clases de forma regular y se encargan de dar apoyo a pequeños grupos o de lectura matinal. Los alumnos trabajan los contenidos de diferentes assignaturas en grupos heterogéneos del mismo curso y disponen de un adulto por grupo como conductor. De esta manera, es posible disponer de más de un transmisor en el aula en lugar de quitar a los alumnos que presentan dificultades para reforzarlos de manera externa.

 

Estos proyectos representan una realidad educativa que, siendo diferente de la tradicional y más utilizada actualmente, ofrecen unos resultados patentes que vale la pena tomar en consideración. Otras escuelas y centros educativos que no obtienen los resultados deseados o que están descontentas con sus metodologías podrían considerar la posibilidad de encontrar un proyecto como los nombrados, adecuado a las necesidades de su centro, para sacar el máximo potencial a los alumnos y al trabajo de los profesionales.

 

Como docente principiante y futura psicopedagoga, estos proyectos pedagógicos innovadores inician mi lista de buenas prácticas, aquellas que provocan un cambio positivo en la metodología y representan una mejora educativa en los alumnos.

 

Nuevas metodologías, comunidades de aprendizaje, trabajo cooperativo, trabajo por rincones, adaptación de la escuela al alumno... buenas prácticas a tener presentes en mi praxis profesional; porqué como dice Tonucci “Una reforma real de la escuela tendría que nacer de los que trabajan en ella”.

Fecha de publicación: 1/3/2014