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MÁS COSAS ALREDEDOR DE LA PEDAGOGÍA SOCIAL

Col·legi Oficial de Pedagogia de Catalunya > Publicaciones > MÁS COSAS ALREDEDOR DE LA PEDAGOGÍA SOCIALMÁS COSAS ALREDEDOR DE LA PEDAGOGÍA SOCIAL[i]

FRANCESC X. BALAGUÉ GEA

Colegiado núm. 42

Barcelona, juliol 2013

 

Algunas reflexiones al hilo del artículo de Xavier Úcar Martínez.

El pedagogo de hoy, tiene un conjunto de conocimientos, técnicas e instrumentos que sirven para allanar el camino, hacerlo claro y seguro hacia el especio y el momento del aprendizaje. Independientemente del ámbito donde se produzca.

 

La lectura del artículo de Xavier Úcar publicado el pasado mes de junio en el espacio Hablemos de Pedagogía del Rincón del Consejo[ii], me ha sugerido algunas reflexiones y algunas preguntas sobre el Pedagogo Social, que en la época en que trabajé en la DGAI ya me hice y que ahora han resurgido. 

 

Probablemente las dudas y los recuerdos sobre la figura del pedagogo social me han venido al leer el artículo de Xavier Úcar y las opiniones que expresa sobre enseñar y aprender y sobre las conexiones claras, supuestas o inexistentes, según los casos. Y también con la afirmación que el pedagogo social: “El pedagogo o el educador social puede ser, sin duda, alguien que enseña, pero esta no es ni su función principal ni la única”.

 

Para alguien como yo que está muy lejos del mundo académico y que su trayectoria profesional no le ha llevado a mantener un vínculo continuado y próximo con los estudiosos de la Pedagogía, ni ha seguido los últimos trabajos teóricos, resulta arriesgado pretender exponer opiniones no coincidentes, al menos en apariencia, que se puedan interpretar como matizaciones a un catedrático en la materia. Corro el riesgo de estar desfasado en los conocimientos o de tener una concepción limitada de determinados conceptos que, probablemente, van mucho más allá de donde yo los sitúo. Pero a pesar de todo, permitidme que utilice este espacio de opinión para, al hilo del artículo de un profesor de universidad, hacer mi aportación que, en ningún caso cuestiona nada, pero si que quiere abrir interrogantes i quizás caminos donde el pedagogo social enseña a prender. Y también algunas dudas estructurales sobre las figuras profesionales en la intervención social.

 

Creo que la definición de Pedagogía que recuerda Xavier Úcar al inicio de su artículo como la actividad de unos esclavos que acompañaban a los niños a la escuela, nos permite, con alguna licencia narrativa, situar a la Pedagogía en general y a la Social en particular, como la ciencia que lleva a las personas, niños, adolescentes o adultos, a situaciones de aprendizaje. De la misma manera que el esclavo daba la mano a los pequeños en el camino, o los protegía de la lluvia, o los guiaba por el camino con una luz cuando oscurecía para llegar en buenas condiciones al “espacio del conocimiento”, el pedagogo de hoy tiene un conjunto de conocimientos, técnicas i instrumentos que sirven para allanar el camino, hacerlo claro y seguro hacia el espacio y el momento del aprendizaje. Independientemente del ámbito donde se produce este aprendizaje, también de si se trata de asumir conocimientos teóricos o prácticos, ya sean escolares/académicos, como laborales o sociales y morales, como si son procesos de maduración personal donde se requiere un buen acompañamiento. Independientemente de que la asunción de ese conocimiento, la consecución del objetivo o la integración de unos hábitos o la consolidación de un valor moral sucedan en el tiempo y el espacio compartido con el pedagogo o no, la función de la Pedagogía será allanar y desbrozar el camino que permita recorrerlo.

 

Por eso, a pesar de las dudas que algunas frases del artículo citado me habían abierto, sus dos últimos párrafos me vuelven a dar la certeza de que si no decimos lo mismo, estamos muy cerca. Así cuando dice: “El pedagogo social desarrolla estas funciones acompañando a las personas en sus procesos de aprendizaje incitándoles para que sean ellas mismas las que trabajen o aprendan a trabajar en la mejora de sus particulares situaciones en el mundo.” Yo entiendo que el Pedagogo con su saber y a través del ejemplo, el comentario, el silencio, el refuerzo, la palabra, etc. Está enseñando el camino que el otro ha de recorrer y en el que tendrá que resolver las dudas y los conflictos que puedan presentarse. Y el pedagogo estará cerca para acompañarlo en este camino.

 

La otra duda que tengo, más estructural, y que no ha sido objeto del artículo de Xavier Úcar, es la proliferación de figuras profesionales de la pedagogía social, de la educación social, de la integración social. En estos momentos hay profesionales de dos diplomaturas universitarias y de un ciclo formativo de grado superior que se dirigen a los mismos usuarios y no sé, y me lo pregunto, si está suficientemente claro Quien hace Qué. En los tres perfiles encontramos una pretensión de tener que planificar la intervención, de coordinarse con el resto de profesionales que intervienen en el caso. I sigo sin tener claro quien está para hacer qué. Y probablemente el gran contratante de estos profesionales, la administración, tirará por el camino de en medio, el del ahorro, y quizás optará por aceptar la figura con el nivel laboral más básico, es decir más barata, para el trabajo con los usuarios, mientras continua en el limbo la definición de las responsabilidades profesionales de los distintos perfiles.

Algún día alguien lo hará por nosotros.



[i] El artículo se puede reproducir, citando la Fuente i el autor/a

Fecha de publicación: 10/7/2013