COMUNICADO COPEC: “EN UN CURSO INCIERTO: RESPUESTAS PEDAGÓGICAS, CREATIVAS Y FLEXIBLES”

“EN UN CURSO INCIERTO, SE NECESITAN RESPUESTAS PEDAGÓGICAS CREATIVAS Y FLEXIBLES”

Desde el Colegio de Pedagogos de Catalunya, ante la incertidumbre de este curso 2020-2021 con más incógnitas que respuestas, queremos aportar reflexión al debate sobre cómo garantizar el inicio y la continuidad del curso escolar, para que sea seguro, inclusivo y de calidad.

Una reflexión con voluntad de sumar y colaborar con la Comunidad Educativa, como pedagogos/as y psicopedagogos/as, en esta situación de emergencia educativa a la que hay que dar respuestas creativas y flexibles, así como recursos personales y materiales.

La ESCUELA es un SERVICIO ESENCIAL y debemos ser constructivos y trabajar juntos por un mismo objetivo: garantizar el derecho a la educación de nuestros niños/as, adolescentes y jóvenes.

 

LA COMUNIDAD EDUCATIVA

Estamos frente a un gran reto: enfrentar las incertidumbres de un curso que debe garantizar el regreso a las aulas a los niños/as y adolescentes en un entorno seguro y, al mismo tiempo, garantizar su proceso educativo con plenitud. En este desafío de proporciones mayores, todos y todas somos corresponsables: maestros, profesores, pedagogos/as, psicopedagogos/as, familias, alumnos... Y, por supuesto, la Administración Pública competente, que debe proporcionar los recursos personales, materiales y organizativos.

El Departamento de Educación está dando recomendaciones e instrucciones a los Centros Escolares, en función del Departamento de Salud. Recomendaciones cambiantes que generan confusión entre las familias y entre los equipos directivos y docentes. ¡Lo entendemos! No tenemos experiencia en esta situación y se esperaba que en verano la pandemia disminuyera de intensidad y no ha sido así, todo esto dificulta dar respuestas concretas que generen seguridad.

Es por eso que desde el Colegio de Pedagogos/as, estamos convencidos de que para este curso tan atípico, se necesitan respuestas pedagógicas creativas y flexibles por parte de todos y todas. Todos debemos trabajar juntos para que pueda transcurrir con naturalidad, sin dramatismos, adaptándonos a los embates de la pandemia y abordando pedagógicamente la situación dentro del aula, para salir fortalecidos.

LOS CENTROS EDUCATIVOS

Expertos y expertas recomiendan la reducción de los grupos estables con pocos alumnos y con poca movilidad docente. Por otro lado, se recomienda flexibilización de horarios en caso de escuelas masificadas y donde sea difícil la distribución de alumnos y espacios. Otros expertos/as sugieren que aprovechar el buen tiempo para dar clases al aire libre sería una buena solución teniendo en cuenta la climatología y las posibilidades del entorno. Propuestas pedagógicas todas muy válidas, pero no hay una única receta para todos los Centros Educativos.

En este sentido, apostamos por un curso escolar en el que se pueda ejercer realmente la autonomía del centro en función de sus necesidades, su Proyecto Educativo y su contexto y diversidad. Cada Escuela/Instituto es diferente, con casuísticas propias: entorno social y económico, entorno rural o urbano, instalaciones... Lo que necesita el Centro es el apoyo del Departamento de Educación en cuanto a recursos e infraestructura, para poder adaptar la organización y hacer frente al curso 2020-2021.

Por otro lado, ante la posibilidad de realizar un curso híbrido debemos estar preparados y buscar alternativas pedagógicas para que este sea accesible para todos los niños/as y adolescentes -sin excepción-, donde se pueda garantizar que en las etapas de educación infantil y primaria haya acompañamiento adulto y que este sepa cómo hacer dicho acompañamiento.

LAS FAMILIAS

La incorporación de nuevo al mundo laboral supone una reorganización familiar con la incertidumbre de qué pasará con los hijos e hijas y si podrán tener un regreso seguro a la escuela. Hay familias que tienen dudas sobre el regreso a la escuela y se plantean no hacerlo, es una realidad. Es necesario escuchar a las familias, tienen todo el derecho, y se debe actuar pedagógicamente desde la escucha activa y la comprensión, no desde la confrontación o la amenaza.

A las familias se les abren muchas preguntas relacionadas, por un lado, con la salud y educación de sus hijos e hijas y, por otro, cómo compatibilizarán el regreso al trabajo en caso de confinamiento. El teletrabajo puede ser una solución para no interrumpir el curso, en caso necesario, pero no lo es para todas las familias

Lo más importante es que, en caso de que los hijos e hijas tengan que hacer clases virtuales, haya garantía de que todos tendrán la oportunidad de conectarse y seguir el curso. En caso de que no sea así, el Centro Educativo debería prever alternativas presenciales o de apoyo. Y el Departamento de Educación debería apoyarlo con recursos materiales y profesionales.

Asimismo, se deberán tener en cuenta las barreras comunicativas que puedan existir con las familias. En este sentido, se deben prever medidas preventivas por la imposibilidad de hacer reuniones presenciales o el uso de mascarilla y distancia. Se trata de medidas que nos pueden distanciar no sólo físicamente, sino también en la relación misma entre la familia y la escuela, tan importante de cuidar. En este sentido, se deberá mantener una relación colaborativa, de confianza y complicidad, asegurándonos de que llegue bien el mensaje que queremos transmitir.

EL ALUMNADO

Apostamos por una vuelta a la escuela lo más segura posible, siguiendo las medidas sanitarias recomendadas por expertos y expertas, porque los niños/as, adolescentes y jóvenes necesitan relacionarse con sus iguales. Desde la etapa del 0-3 hasta el final de la etapa obligatoria, posibilitar las relaciones entre sus iguales, y de los iguales con sus adultos de referencia, garantiza el ejercicio de sus derechos como niños y adolescentes.

Por eso, antes de entrar en cómo debe ser la organización y el currículum, es necesario hablar de la socialización. Los niños y las niñas, adolescentes y jóvenes necesitan compartir lo que piensan, lo que sienten, necesitan confrontación de ideas, retos, contradicciones para poder crecer, y eso no solo se logra en la familia, sino también con la relación con sus iguales de la cual han estado bastante privados.

Desde la perspectiva pedagógica, mantener grupos estables permitirá una interrelación natural entre los niños/as dentro del aula, favoreciendo el mantenimiento de dinámicas de aula -previas a la pandemia- basadas en el aprendizaje globalizado y cooperativo. Además, la interacción con otros grupos se puede hacer "virtualmente" mediante tareas compartidas.

En un curso incierto como este, el paradigma pedagógico en el que nos debemos apoyar debe centrarse en el alumno. Es necesario poner al alumno en el centro como artífice de su aprendizaje para que vaya construyendo gradualmente su proceso, con la guía del docente. Nos dirigimos hacia la personalización en el aprendizaje, donde se respete el ritmo de cada alumno/a, con una mirada inclusiva y hacia una visión globalizada del currículum. No hay asignaturas, no hay bloques, el aprendizaje es global como lo es nuestro pensamiento.

El alumno/a debe hacer, construir, pensar, discutir con sus iguales para llegar al aprendizaje y que este sea significativo. Es una oportunidad pedagógica para desterrar la visión del alumno como un "actor pasivo" que escucha y reproduce. El alumno/a es y debe ser el centro de la acción educativa y co-partícipe de su aprendizaje, y los docentes debemos acompañar y facilitar una evaluación competencial.

LOS EQUIPOS DOCENTES

Tenemos que estar preparados para compatibilizar la presencialidad con la virtualidad, por eso será necesario que los maestros, el profesorado, los pedagogos/psicopedagogos... tengamos formación en metodologías virtuales y seamos imaginativos para hacer atractivo el aprendizaje. Ya sea el aprendizaje presencial o virtual, será necesario tener en cuenta las etapas de los niños/as, la diversidad del grupo y a partir de ahí aportar flexibilidad, apoyo, personalización e implicación de toda la comunidad educativa y, por supuesto, del alumnado.

Independientemente de la modalidad pedagógica –presencial o virtual- a la que nos podamos ver obligados a realizar, el Equipo Directivo de cada Centro tiene la responsabilidad de garantizar la transversalidad del currículum. Se debe encontrar el equilibrio pedagógico en la distribución del equipo docente en los diferentes grupos estables, para que los niños/as y los jóvenes reciban una formación de máxima calidad y tengan el acompañamiento y el apoyo en su proceso.

No puede desaparecer el profesorado especialista, ni tampoco se puede bajar la guardia en los avances conseguidos en la atención a la diversidad del alumnado, especialmente con la atención a los alumnos con necesidades específicas de seguimiento educativo (NESE).

Recomendaciones para las clases virtuales:

Una clase online no es igual que una clase presencial. La virtualidad no es cercana. Sabemos lo importante que es que el maestro/profesor pueda ver a todos los alumnos, que observe su postura corporal, su lenguaje no verbal. Si no vemos a los alumnos, no sabemos si siguen o no, si les interesa o no. Por lo tanto, la primera recomendación es que todos nos debemos ver e interactuar.

Hay muchos programas disponibles para crear esta interacción, trabajar en contenidos e incluso evaluarlos, para desarrollar competencias en cualquier nivel educativo facilitando el trabajo colaborativo, potenciando la oratoria como herramienta para trabajar las emociones y la expresión oral. Como pedagogos/gas, sabemos que lo primero que se debe tener claro es que lo quiero conseguir, que quiero trabajar y luego aplicar el programa más adecuado.

Es importante medir bien la carga de trabajo, los alumnos necesitan espacios porque el tiempo virtual no es igual que el tiempo presencial, por este motivo las clases deben ser inferiores a 1 hora. Todos estamos mucho más cansados después de una sesión virtual, porque requiere más concentración. En la programación pedagógica es importante organizar el aprendizaje en base a actividades y dar a la materia la oportunidad de un ritmo en el que nadie se pierda, que siempre se esté a tiempo de engancharse.

Recomendaciones para las clases presenciales:

Además de los indiscutibles aspectos socializadores de la presencialidad, en una clase presencial hay complicidad entre el docente y los alumnos, hay proximidad en la interacción personal. Son aspectos pedagógicos que debemos aprovechar al máximo, y más sabiendo que en cualquier momento podemos tener que confinarnos.

Sabemos que las aulas tendrán elementos nuevos con los que tendremos que trabajar con la MASCARILLA, la DISTANCIA y el LAVADO DE MANOS. Son elementos que formarán parte de la cotidianidad de todo este primer trimestre -y tal vez más allá- y debemos incorporarlos a las actividades pedagógicas con mucha creatividad: en los debates, en los trabajos en grupo, en la búsqueda de información, en los talleres...

Replanteamiento de la evaluación:

Ante esta nueva "normalidad" académica, la evaluación es una parte pedagógica del proceso que hay que analizar y replantear hacia una evaluación competencial. Profundizando en la evaluación del proceso y en el acompañamiento a través de bases de orientación.

Una evaluación, donde el ensayo y el error formen parte del aprendizaje, potenciando la creatividad y la resolución de retos frente a la memorización de contenidos. Desde la perspectiva pedagógica, apostamos por una evaluación que tenga en cuenta el punto de partida del alumno/a, con sus circunstancias personales, y su proceso para ir alcanzando los retos de aprendizaje que, en función de su ritmo, vaya avanzando.

A MODO DE CONCLUSIÓN...

Estamos a pocos días de iniciar un curso con una realidad incierta y cambiante, desde el Col·legi de Pedagogia de Catalunya, lo valoramos como una oportunidad para desarrollar estrategias pedagógicas innovadoras y creativas para enfrentar los desafíos planteados en esta situación de pandemia.

Y donde los profesionales de la educación, debemos ser -y somos- capaces de crear y potenciar situaciones de aprendizaje, donde nuestros niños/as y jóvenes puedan desarrollar todas sus capacidades académicas, sociales y emocionales.

Maestros, profesorado, pedagogos/as, psicopedagogos/as, psicólogos/as, equipos directivos, profesionales de atención educativa... todas y todos formamos parte de un Servicio Esencial: la ESCUELA, volveremos a dar respuesta a nuestros niños/as, adolescentes y jóvenes, con resiliencia, responsabilidad, compromiso e implicación.

Salud y Pedagogía!

Junta de Govern (*)

Col·legi de Pedagogs de Catalunya

9 de setembre de 2020

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(*) Document elaborat amb el lideratge de la VOCALIA DE PEDAGOGIA I ESCOLA, amb la participació de: 

Joan Gamero, M. Victòria Gómez, Marta Fabregat, Maria de M. Oliveras, Laia Pinilla, Núria Pedrós i Rosa Rodríguez

Validat per la Junta de Govern el 09/09/2020

Fecha de publicación: 9/9/2020