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A. BONMATÍ: "GESTIONAR LA ALTA SENSIBILIDAD DE NIÑOS Y NIÑAS"

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Alba Bonmatí Sánchez [1]
Colegiada número 1410
Sant Julià de Ramis, 15 de mayo de 2020

Hablamos de Alta Sensibilidad de Procesamiento Sensorial cuando nos encontramos con personas con un sistema nervioso más sutil, más desarrollado que el de la mayoría de la población. Entre otras características, las personas con Alta Sensibilidad (AS) presentan una tendencia a la sobreestimulación, así como una fuerte emocionalidad ligada a una gran capacidad empática. Estas características a menudo cuestan de gestionar con los niños y niñas con AS, especialmente en situaciones que salen de la normalidad, como la que vivimos actualmente.

La orientación que podamos ofrecer los profesionales de la pedagogía y la psicopedagogía ayudará, con seguridad, a que padres y maestros tengan la capacidad de entenderlos mejor y acompañarlos de la manera más adecuada posible.

Es un hecho que todavía hoy, el concepto Alta Sensibilidad no es suficientemente conocido. Muy a menudo nos encontramos Niños y Niñas con Alta Sensibilidad (NAS) que han sido catalogados como miedosos, inseguros, lentos… hasta mimados. Se trata de un perfil de niño/a que todos conocemos, y que se calcula son entre un 15 y un 20% del total.

Los NAS son niños/as con un sistema nervioso que tiene unos receptores más activos que los de la media de población, un rasgo profundamente estudiado por la psicoterapeuta Elaine N. Aron, que también describió su personalidad, en términos generales.

Hablamos de niños/as con una sensibilidad extrema, empáticos, atentos, prudentes y creativos, entre otras virtudes, pero también en muchas ocasiones sobrepasados por unas emociones que a menudo les cuesta gestionar.

Niños y niñas con tal grado de sensibilidad que lloran muy fácilmente, por cosas que a los demás nos parecen insignificantes; con tal grado de reflexión que dan vueltas y más vueltas a las cosas, eternizando decisiones; con tal grado de profundidad que sienten intensamente cada emoción (aunque a menudo no muestren esta intensidad en entornos que no les son muy familiares).

Si eres padre, madre o maestro/a de un niño o niña con Alta Sensibilidad has de saber que como viva este niño/a la situación de confinamiento dependerá, en gran medida, del acompañamiento que les podamos ofrecer los adultos con quien convive y se relaciona. 

Recordamos que el rasgo de la Alta Sensibilidad se caracteriza por cuatro aspectos, representados por el acrónimo PSES:

  • Profundidad de procesamiento
  • Ser fácilmente Sobreestimulado
  • Ser Emocionalmente reactivo y Empático
  • Mostrar una elevada consciencia de los estímulos Sutiles.

Esto quiere decir que son niños/as que viven y sienten de manera mucho más profunda todas las situaciones en las que se ven inmersos. Imaginémonos, pues, qué debe sentir y pensar un niño o niña con Alta Sensibilidad ante una avalancha de noticias, conversaciones y sucesos a las que se ven expuestos estos días. 

La situación actual de confinamiento y todo lo que se deriva nos ha traído un cambio brusco de nuestro día a día, una incertidumbre muy grande sobre el futuro de todos, y un grado elevado de miedo por el contagio y a todas sus consecuencias. Así pues, tanto si somos padres, como familiares, como maestros de un niño o niña con Alta Sensibilidad, nuestro soporte y comprensión de sus necesidades puede marcar la diferencia con como viva este niño la nueva situación. 

¿Qué puedo hacer yo, para acompañarlos?

  • En primer lugar, es preciso respetar sus decisiones. Aunque en estos momentos ya está permitido que los niños y niñas salgan a pasear una hora al día, no le tenemos que forzar a salir, si él o ella no quiere. También es posible que estos días se le proponga hacer videoconferencias multitudinarias con compañeros o familiares, es frecuente que los niños y niñas NAS se sobreestimulen en estas situaciones, pudiendo llegar a angustiarse. Es importante respetar sus ritmos y necesidades y probar de ofrecerle alternativas que le sean más placenteras, siempre que sea posible. Cuando no haya una alternativa adecuada y el niño/a se tenga que adaptar a la situación, puedes probar de ofrecerle un acompañamiento que le ayude a sentirse más seguro (estando a su lado mientras dura la llamada, por ejemplo). 
  • Habla de todo, pero sin exagerar. Los niños y niñas NAS son curiosos y a menudo hacen preguntas profundas. Intenta responder sus inquietudes, pero sin dar una importancia excesiva ni monopolizar las conversaciones. Se trata de darle información veraz y proporcionada, la justa para que pueda estar tranquilo/a y comprender la situación.
  • Respeta y habla sobre las emociones. Pídele que te explique como se siente, cuáles son sus miedos. Es importante que el niño/a pueda expresarse libremente, sabiendo que no se tiene que avergonzar y que no minimizarás sus miedos. Explícale como lo haces tu para afrontarlos. 
  • Anticipa. Los niños/as NAS les suele costar mucho adaptarse a las nuevas situaciones. Por ello le será más fácil adecuarse a los cambios que se van produciendo si los conoce con antelación. Habla con él/ella de las propuestas que van haciendo los gobiernos, siempre y cuando esté claro que se llevarán a cabo (por ejemplo, “Han dicho que la semana que viene ya podremos salir un rato cada día a pasear”).
  • Deja espacios de calma y no te sientas mal si tu hijo/a te rechaza. Cuando tu hijo/a necesite aislarse un rato, respeta su necesidad e intenta recordar que no tiene nada que ver contigo. A menudo los niños/as NAS requieren pasar tiempo solos para recuperar el equilibrio, especialmente después de situaciones que les han producido una sobreestimulación.
  • Pasa tiempo con tu hijo/a. Dile que le quieres, pasa tiempo con él/ella, y deja que sea el niño/a quien marque el ritmo de la actividad. Por otro lado, todos juntos hemos descubierto estos días que esto de teletrabajar no es tan fácil ni tan bonito como parecía. No te angusties si no puedes darle todo el tiempo que querrías, los niños y niñas pueden entender que todos tenemos responsabilidades y que no les podemos dedicar todo el tiempo a ellos, lo importante es que los ratos que paséis sean de calidad. 

Por último, recordar que cada NAS, así como cada persona, es diferente y única. Nadie conoce mejor a los niños y niñas como sus padres y personas próximas, por lo que los consejos anteriores son indicaciones genéricas que será preciso adaptar a cada niño y situación. 

Para más información sobre el rasgo de la Alta Sensibilidad podéis consultar la siguiente bibliografía:

  • ARON, Elaine N. (2006). El don de la sensibilidad. Las personas altamente sensibles. Ediciones Obelisco.
  • ARON, Elaine N. (2017). El don de la sensibilidad en la infancia. Cómo ayudar a tu hijo cuando el mundo le abruma. Ediciones Obelisco.
  • SOHST, Kathrin (2017). El poder de la sensibilidad. Editorial Ariel.
  • ZEGERS DE BEIJL, Karina (2018). Personas altamente sensibles. Editorial La esfera de los Libros.

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[i] Alba Bonmatí, psicopedagoga y educadora social, miembro de la Red de Expertos, del Col·legi de Pedagogs de Catalunya, colegiada núm. 1410.
Fundadora de los gabinetes  ARA – Psicopedagogia teràpia Sant Julià de Ramis  www.espaiara.com  i NIUDA - Espai de psicoteràpia i vincle, Girona www.niuda.cat

Fecha de publicación: 15/5/2020