MANIFIESTO TSCAT-COPC-CEESC-COPEC: "PROFESIONALES DEL ÁMBITO SOCIAL RECLAMAMOS UNA RESPUESTA EFECTIV

Profesionales del ámbito social reclaman una respuesta efectiva a las administraciones públicas

La crisis social que está provocando y provocará la pandemia generada por el Covid-19 está dejando al descubierto las carencias y déficits que arrastra, desde hace unos años, el actual sistema de atención a las personas en situación de vulnerabilidad.

Unas carencias y déficits que los colegios profesionales de trabajo social, psicología, educación social y pedagogía, junto con otras entidades y organizaciones del ámbito social, llevamos denunciando desde hace mucho tiempo. Hace 13 años que reclamamos un reglamento que desarrolle la Ley de Servicios Sociales, que se actualice la cartera de servicios sociales que lleva 9 años caducada, que entre en funcionamiento el Plan Interdepartamental de Atención Integrada Social y Sanitaria, actualmente reconvertido en PAISS, o que se impulse el Libro Blanco de las Profesiones Sociales, entre otras. Reclamaciones y proyectos que siempre quedan sin abordar o sin finalizar, poniendo en evidencia que los temas sociales no son prioridad para las administraciones. 

Esta crisis que estamos viviendo nos está dejando muy claro que es necesario hacer una apuesta clara y firme para reforzar nuestro sistema sanitario y, también, el social. No podemos dejarlo todo en manos de unas y de unos profesionales que, a base de profesionalidad y compromiso, están llevando adelante esta situación. Se deben tener recursos y respuestas apropiadas para afrontar el incremento, que ya estamos viendo, de personas que han pasado a estar en una situación vulnerable o que, a raíz de la pandemia, han visto como su realidad, que ya era frágil, ha empeorado mucho más. 

Por este motivo, los Colegios Oficiales de Trabajo Social, Psicología, Educadoras y Educadores Sociales y Pedagogos reclamamos que se haga efectivo, con la máxima rapidez, el II Plan Estratégico de Servicios Sociales (PESS), con un calendario y una dotación económica específicos, que permita ordenar los Servicios Sociales en Catalunya y poder afrontar con garantías la actual emergencia. Evidentemente, con la incorporación de las orientaciones y correcciones al documento que presentamos los diferentes colegios profesionales y las de los profesionales que participaron en las diferentes mesas territoriales.

Con una situación como la que estamos viviendo, queda claro que los recursos deben ser dinámicos y flexibles. Por ello, tenemos que disponer de una cartera de servicios sociales actualizada que se adapte a las necesidades de la sociedad en cada momento.

También pedimos que la planificación estratégica de los servicios básicos y de los especializados elimine las desigualdades, favoreciendo la justicia social. Esto significa que toda la ciudadanía pueda acceder a los mismos servicios y en las mismas condiciones, independientemente del municipio donde reside. 

Es importantísimo que las y los profesionales de la intervención social tengamos presencia en todos los sistemas (vivienda, infancia, salud, personas mayores, etc.). De esta manera, podremos atender y acompañar desde cada ámbito y evitar que todo acabe en los servicios sociales básicos, cosa que acaba provocando un colapso del sistema. Por tanto, pedimos clarificar las competencias y obligaciones de todo el sistema de servicios sociales, velando por la coordinación real entre los diferentes ámbitos y poniendo siempre la persona en el centro. Es necesario que el sistema se adecue a las personas y no las personas al sistema.

Así mismo, para garantizar una atención basada en la calidad y no en la cantidad, se deben repensar los criterios a la hora de establecer las ratios de profesionales, actualmente basadas en el número de habitantes, y optar por otros indicadores territoriales (desempleo, envejecimiento de la población, media de ingresos, etc.).

Consideramos, también, que se tiene que reforzar los recursos de acompañamiento y apoyo a diferentes colectivos (niños, personas mayores, personas con discapacidad, etc.) para que no queden desatendidos por la falta de medios. O, como en el caso de las personas mayores, y tal como ha quedado demostrado con las devastadoras consecuencias que ha tenido la pandemia en las residencias, se debe repensar el actual modelo de atención a este colectivo.  

En conclusión, exigimos a la Generalitat, pero también a las entes locales y supramunicipales –entidades competentes en la prestación de los servicios sociales y más próximas a la ciudadanía–, que pongan en marcha todos los mecanismos necesarios para mejorar el actual sistema de atención a las personas vulnerables. La crisis económica de 2008 nos dejó muchos aprendizajes. En aquel momento, las administraciones reaccionaron de una forma muy lenta a las demandas sociales. Vamos por el mismo camino, y no podemos permitir una situación igual. Son precisas respuestas efectivas, rápidas y consensuadas para atender este momento tan crítico. Si no el actual sistema será incapaz de atender a estas personas, no por falta de voluntad, si no por falta de capacidad.

20 de mayo de 2020

Entidades promotoras

Col·legi Oficial de Treball Social de Catalunya

Col·legi Oficial de Psicologia de Catalunya

Col·legi d’Educadores i Educadors Socials de Catalunya

Col·legi de Pedagogs de Catalunya

Fecha de publicación: 20/5/2020