EL PERIÓDICO - "Ver series infantiles sin control adulto perjudica las relaciones sociales y el rend

Los pedagogos alertan de la tendencia de los hogares occidentales de mantener distraído a los hijos con la serie infantil de turno sin que medie una supervisión permanente por parte de los padres. Una decisión que puede acarrear riesgos, en tanto que los niños mimeticen patrones de conducta que observen en esos espacios, un extremo que puede resultar nocivo tanto para sus relaciones sociales como para su rendimiento académico.

Esa es la principal conclusión que extraen las responsables del informe 'Series infantiles. Una aproximación de análisis pedagógica', en la que el Colegio de Pedagogos de Catalunya analiza las principales producciones de éxito entre los más pequeños y alerta contra el "uso de estos visionados como el servicio de canguro infantil". "Con la irrupción de tabletas y 'smartphones', aumenta la autogestión de los pequeños y, así, el riesgo de que influencias poco recomendables no sean matizadas por un adulto", destaca Victòria Gómez, directora del estudio.

Malas influencias en series aparentemente inocentes como 'Peppa Pig', en la que la cerdita protagonista vive experiencias que puede encontrarse un niño. El informe, que ha encuestado a menores, padres y profesores, destaca el "carácter inestable y tozudo" de Peppa y que su hermano George acostumbre a conseguir sus deseos llorando.

En otros rangos de edad, de 6 a 12 años, los focos se ponen en producciones como 'Doraemon', que reproduce situaciones de 'bullying' hacia el personaje más débil y "desincentiva el valor del esfuerzo"; 'Shin Chan', que potencia la falta de respeto y el exhibicionismo, y 'Monster high', que "promueve la hipersexualización de preadolescentes, fomentando la superficialidad y el sexismo", destaca Gómez.

Tampoco es mejor influencia la decadente vida de Homer en 'Los Simpson' o la violencia y el riesgo de fomentar la vigorexia de la mayoría de personajes de 'Bola de dragón'. Series que también pueden aportar valores positivos, como la cultura del esfuerzo de la producción japonesa.

"Se hace imprescindible la mirada pedagógica que debe aportar un adulto para corregir malas influencias de expresiones verbales y no verbales, así como pactar el tiempo límite que podrá ver la TV: en una hora ya le puede llegar más información de la que puede asimilar", destaca Gómez. Y enfatiza sobre la importancia de la interacción paterna: "Con el paso del tiempo, los niños no recordarán si jugaban con la Patrulla canina o con Bob esponja, sino si sus padres jugaban con ellos o no".

Fecha de publicación: 16/12/2016